Si tiene la oportunidad de visitar Morbihan en Navidad, pasarse por Rochefort-en-Terre es una cita ineludible. Desde el primer momento se sumergirá en la magia de la Navidad. En las calles, el cielo está iluminado por miles de bombillas y los puestos de los artesanos compiten en imaginación para exponer a los visitantes sus creaciones. Aproveche todas estas ideas y propuestas, es una buena ocasión para comenzar a pensar el menú de este año para las cenas de Nochebuena y Nochevieja y juegue a ser Papá Noel llenando su saco de regalos originales y “Made in Bretaña Sur”. Quién sabe, en cualquier esquina se puede encontrar con ese gran señor de barba blanca y vestido de rojo, al que esperan ansiosos todos los pequeños (y los no tan pequeños) la noche del 24 al 25 de diciembre.